La tarea principal de la existencia es la tarea del olvido de la existencia. " El tallo que se doble para ver sus raíces acabará partido" , decía el poeta, y esto para cualquiera es fácil de entender. Si la vida fracasa, es por falta de olvido. Todas nuestras energías deberían por tanto encaminarse hacia este objetivo, no importa el modo. ¿ Cuando hemos sido más reales ? ¿Por qué no seguir hacia adelante olvidando las piedras del camino? El olvido vive ahí fuera, a un tiro de piedra de la voluntad. Y la voluntad es la única herramienta con la que contamos para olvidar todo lo que hemos sido.
Y...mejor caminar con la vista puesta hacia adelante para ver lo que queremos ser....
Posiblemente si olvidamos tengamos que volver a vivirlo, las piedras del camino nos esperan. Un abrazo
ResponderEliminarSeguramente que lo vivido nos sirve de lección...pero mejor seguir adelante sin tantas precauciones, a veces equivocarnos nos sirve también como aviso...
EliminarUn abrazo.
Funes el memorioso
ResponderEliminarBorges en el recuerdo.
Pobre hombre aquel personaje de Borges, que estaba condenado a recordarlo todo...
EliminarBien traído, primo...
He olvidado todo lo que he podido pero es que cada día hay más basura eh...
ResponderEliminarBesos.
Desde luego que sí, Toro querido, y hay épocas tan tristes y con tanta desfachatez, que es como aviso para navegante ¡hay que tenerlas muy en cuenta!
EliminarY cuando se trata de corruptos dedicados a la política...que hace cualquier cosa con tal de distraer al pueblo. Mejor que dejen de ser ladrones y, cuando devuelvan lo que no es suyo, que pidan lo que les corresponde.
Besos.
He llegado hasta el final, y el final tenía sorpresa. Escalofríos al leer a mi querido Hesse. ¿Osas dar las gracias? No, perdona: gracias a ti. No conocía este texto prodigioso. De tan bello y real el corazón lo recuerda como algo escrito en él, anterior a las palabras. Algo que la vida y la experiencia confirman.
ResponderEliminarMira que no soy precisamente platónico ¡pero al final voy a creer en las reminiscencias!
Me encanta tu regalo, y que lo hayas colocado justo ahí, supongo que dice mucho de ti...
Nos conocimos en otra vida, también estoy al final de tu blog.
Me alegra que sigas por aquí. Dime, ¿nunca llegué al final de tus letras o el texto lleva poco tiempo ahí? (O yo mucho tiempo sin leerte)
Respecto al post: el niño que juega no sabe que juega, sólo lo hace y sigue adelante. Y cada segundo su vida es mil veces más intensa a la de cualquier adulto consciente de su propia consciencia, que "juega" y sabe que juega...
Felices fiestas si te gustan. Si no es así, felices días.
Y besos. Es curioso no leer a alguien en mucho tiempo, volver a leerlo y ser capaz de leerlo por primera vez...
Pues mira tu qué sorpresa que te haya apetecido ir revoloteando por algunos blogs cual efímera mariposa...jaja.
ResponderEliminarEres algo atípico pero reconocible, y es una pena que ahora te hayas alejado de este mundo de los blogs. Aunque de vez en cuando, como ahora, no te resistas a la tentación de dejar algún comentario, cosa que particularmente agradezco.
Sobre el texto de Hesse, al que te refieres, está ahí desde el principio, como también está lo de Zarathustra... me gusta colgar estos "adornos" jajaja, para que quien venga le de por reflexionar...
Y sí, besos y felices Fiestas.